martes, 30 de agosto de 2016

El círculo de Podemos en Vélez-Málaga critica la incorporación del ex edil de Ciudadanos, José Antonio Moreno Ocón, al equipo de gobierno municipal


•La formación morada tacha de “burla” e “insulto a la inteligencia” premiar con dos delegaciones, incluida Educación, a quien ha sido expulsado de su partido por triplicar la tasa de alcohol en un control

Vélez-Málaga, 30 de agosto de 2016.-  Si algo tiene que ser la actividad pública además de ejemplar es ejemplarizante. Por este motivo, desde Podemos consideramos una burla a la ciudadanía que quien fuera condenado, siendo concejal en ejercicio, a ocho meses y dos días de retirada de carné y a una multa de 1.440 euros por un delito de conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas, no solo no haya renunciado a su acta de concejal pese a habérselo solicitado su partido de procedencia, sino que precisamente la expulsión del mismo por los motivos anteriormente referidos le haya abierto las puertas del equipo de Gobierno municipal, algo que consideraciones éticas aparte, resulta de dudosísima legalidad, toda vez que, como reza el artículo 73.3 de la Ley de Bases de Régimen Local: “Los derechos económicos y políticos de los miembros no adscritos no podrán ser superiores a los que les hubiesen correspondido de permanecer en el grupo de procedencia”.

Mientras que en sociedades avanzadas como Suecia, según conocíamos hace algunos días, una ministra decidía renunciar a su cargo por haber dado 0,20 miligramos en un control de alcoholemia (una cantidad inferior a la tasa permitida en España), en un municipio como Vélez-Málaga, tercero en importancia de la provincia, hechos de esta naturaleza no solo no parecen recibir ninguna sanción social ni inhabilitan a los representantes públicos que los cometen, sino que tienen “premio” en forma de liberaciones (en razón de 36.000 euros brutos anuales) y asunción de nuevas responsabilidades de gobierno.

Desde Podemos en Vélez-Málaga, rehuyendo cualquier moralismo y asumiendo que las personas pueden cometer errores que no tienen que acarrear su “muerte civil”, consideramos en cualquier caso que resulta ridículo afirmar que conductas como las cometidas por el señor Moreno Ocón deben quedar circunscritas a la esfera “privada y personal” del infractor, pues por la misma regla de tres alguien podría decir –como de hecho durante años así se sostuvo para vergüenza y escarnio de las víctimas– que delitos como la violencia de género también se salen del ámbito público y que, por lo tanto, no merecerían una reprobación más allá de la propiamente judicial.

Desde este punto de vista y con independencia de la posición mantenida por el ex edil de Ciudadanos durante los últimos meses, consideramos que la indecorosa actitud del tripartito formado por PSOE, GIPMTM y PA al integrar al concejal no adscrito, supone un nuevo torpedo lanzado a la credibilidad en las instituciones, máxime cuando el nombramiento viene coronado por la decisión, que más parece un sarcasmo cuando no una provocación, de reservarle, entre otras, al nuevo miembro del gobierno local el área de Educación (dicho sea de paso, la cartera que ostentaba la ministra sueca antes aludida). Resulta un insulto a la inteligencia de las vecinas y vecinos de esta ciudad pensar que el Sr. Alcalde entiende que el concejal más apropiado para dirigir la educación de Vélez Málaga puede ser un señor expulsado de su formación y condenado por conducción bajo los efectos del alcohol.

Como en ocasiones anteriores hemos mantenido, para garantizar la estabilidad del equipo de Gobierno no vale todo y menos que nada el socavar la de por sí minada confianza de la ciudadanía en sus representantes. Aprovecharse políticamente de conductas nada edificantes solo dibuja un panorama de impunidad que lastra la convivencia, y quienes han jurado o prometido por su conciencia y honor cumplir fielmente las funciones de su cargo, deberían predicar con el ejemplo anteponiendo ese compromiso solemne a los intereses personales o de partido.



PODEMOS VÉLEZ-MÁLAGA

jueves, 18 de agosto de 2016



PODEMOS EN VÉLEZ-MÁLAGA SOLICITA AL EQUIPO DE GOBIERNO MUNICIPAL QUE ADOPTE MEDIDAS E INSTE A LA JUNTA DE ANDALUCÍA A RECONSIDERAR SU POSTURA SOBRE LA PLAGA DE COCHINILLA QUE ESTÁ A PUNTO DE HACER DESAPARECER A LAS CHUMBERAS DE LA COMARCA


EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Desde hace algo más de una década la población de cochinilla Carmín, Dactylopius coccus, no ha parado de crecer en el litoral mediterráneo andaluz y africano, causando la progresiva desaparición de la planta que le sirve de cobijo y alimentación, nuestra típica chumbera.

En febrero del presente año, sabedores de la preocupación existente en el mundo rural a lo largo y ancho de nuestra comunidad ante esta circunstancia, la diputada del Grupo Parlamentario de Podemos en Andalucía, María del Carmen García Bueno,  preguntó en la Comisión de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural del Parlamento Andaluz a la responsable del área, María del Carmen Ortiz Rivas, acerca de las medidas que la Consejería pensaba adoptar a este respecto, obteniendo por respuesta poco más que una decepcionante evasiva que podría implicar de facto la extinción de la chumbera.

Para la Junta de Andalucía, la chumbera –especie de procedencia mejicana trasladada a la península tras la colonización de América– es considerada planta invasora, por lo que no considera oportuno actuar. Además, para la propia señora Ortiz Rivas, estas plagas “no están reguladas por la Unión Europea”, por lo que “su existencia no implica obligaciones de erradicación o eliminación de las mismas, siendo por ello una plaga a mantener o controlar por parte de los propietarios del vegetal afectado”. 

Esta actitud -que además pasa por alto el hecho de que buena parte de las plantas afectadas se encuentran en dominio público-, supone la sentencia de muerte a una planta y un fruto, el chumbo, que anuncia la llegada del verano en la Axarquía y que no por nada una de las frutas más refrescantes del periodo estival: ayuda al organismo a reponer las vitaminas, fibras y azúcares que se pierden durante esta estación, sin olvidar los aportes de antioxidantes que su ingesta proporciona.

Para el caso de nuestra tierra, este año todos los consumidores hemos sido conscientes de que probablemente este será uno de los últimos en los que los chumbos que comamos sean autóctonos de la Axarquía y no traídos de Canarias o Perú (con la consiguiente pérdida de frescura, a la que debe añadirse el importante aumento de la huella ecológica).

Hasta hace una década, la chumbera era, nada más y nada menos, eso. Sin embargo, no debemos perder de vista la posibilidad de que ahora, aprovechando la plaga de cochinilla Carmín, esta puede convertirse también en parte del tejido productivo local.  

De hecho, en la actualidad entre los consumidores sigue creciendo el rechazo a la utilización de productos químicos en la elaboración de bienes de consumo; sobre todo los destinados a alimentación, medicamentos o cosmética.  Y he aquí que nuestra todavía “enemiga”, la Dactylopius coccus (cochinilla Carmín) sigue siendo uno de los colorantes naturales más demandados, a cuyo cobijo crece la industria local en lugares como Canarias y algunas regiones del Perú que sí supieron ver que había una posibilidad de empleo real tras la desgracia que además suponía actuar ante las plagas de una manera biológica y natural.  Para hacernos una idea: Perú produce el 84% de la demanda mundial, seguido por las Islas Canarias con el 8%, Chile con el 6% y Bolivia con el 2%.

Desde Podemos en la Axarquía somos conocedores de que se están elevando diferentes iniciativas a nivel provincial y por parte de algunos consistorios, como el de Vélez-Málaga, para que se articulen medidas eficaces para paliar este problema, pero a  la vista de la actitud de la Junta de Andalucía, consideramos urgente una mayor implicación por parte de todos los ayuntamientos y colectivos implicados para obligar a la administración autonómica a que abandone su negligente pasividad.

En base a lo anterior, solicitamos al equipo de Gobierno municipal:
SOLICITUD

1)      Inicie a la mayor brevedad las comunicaciones con el resto de corporaciones municipales y organismos pertinentes de la comarca para trabajar de forma conjunta en esta materia.

2)      Que se ponga en marcha un estudio sobre métodos biológicos para acabar con la cochinilla Carmín.

3)      Que desde la Delegación de Medioambiente se inicien tratamientos específicos para combatir la plaga en los terrenos públicos y se colabore con los propietarios privados para una eficaz eliminación.

4)      Que se realice un plan de viabilidad comarcal del establecimiento de la industria basada en el colorante natural E-120, procedente de la Dactylopius coccus.

5)      Que dichos documentos sean elevados a la Junta de Andalucía, al servicio de sanidad vegetal de la Junta de Andalucía y al resto de organismos pertinentes, para que sean tenidos en consideración.


En Vélez-Málaga, a 17 de agosto de 2016




PODEMOS VÉLEZ-MÁLAGA

lunes, 8 de agosto de 2016

Podemos solicita al Ayuntamiento de Vélez-Málaga inste a la Junta de Andalucía a adoptar las medidas necesarias para recuperar el nivel de servicios sanitarios acorde con una atención de calidad en nuestra comunidad



EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Año tras otro y sin perspectivas de mejora, la Junta de Andalucía viene recortando personal en el sistema sanitario público. Aparte de la disminución de retribuciones fijas, como al resto de funcionarios, y de las variables, ha disminuido efectivos por la vía de prescindir de contratos eventuales y ha dejado de cubrir ausencias por vacaciones, permisos y enfermedad. La consecuencia inmediata de esto es una sobrecarga de unas plantillas ya justas tras la primera medida de reducción de personal eventual. Esta sobrecarga se pone más de manifiesto en los meses de verano, cuando esas plantillas al límite tienen que hacerse cargo del servicio con menos efectivos.

En los hospitales esta sobrecarga se intenta paliar cerrando camas, consultas y quirófanos, y aun así los enfermos hospitalizados quedan atendidos por personal insuficiente (a título de ejemplo: una enfermera contratada en verano, con menos experiencia que las de plantilla, para atender 30 pacientes ingresados con patologías complejas). En Atención Primaria la sobrecarga consiste en el incremento en un 30, 50 o, cuando a las ausencias programadas se añaden las imprevistas, hasta un 100 % de las citas. El tiempo para atender a cada uno
de los 60 ó 70 pacientes, parte de ellos desconocidos porque son del cupo de otro médico, se hace insuficiente, sin perspectivas de poder citar a algunos dentro de tres días para un seguimiento del problema de salud por el que ha consultado. Así que se piden más pruebas y se deriva más a los médicos especialistas, suponiendo que estos los podrán estudiar mejor; y siempre, si el paciente empeora, está el servicio de urgencias del hospital. Consecuencias: colapso de las urgencias hospitalarias, demoras en la atención a consultas de especialistas, profesionales desanimados…

Un círculo vicioso y recurrente ante el que la Junta de Andalucía se limita a esperar que pase el tiempo (el verano, el invierno con la gripe) cruzando los dedos para que no trascienda nada escandaloso a la opinión pública.

El instrumento de gestión para trasladar a los profesionales esa insuficiencia de recursos son las Unidades de Gestión Clínica (UGC), fijándoles objetivos a pesar de contar con menos medios para alcanzarlos, y ligándolos al cobro de la productividad variable. Así, las UGC, que fueron creadas según dice el propio Servicio Andaluz de Salud, para “incorporar a los profesionales en la gestión de los recursos utilizados en su propia práctica clínica”, y donde los objetivos son “fomentar la implicación de los profesionales sanitarios en la gestión de los centros, reforzar la continuidad asistencial entre ambos niveles de atención, mejorar la organización del trabajo y elevar la satisfacción de los pacientes”, se convierten en un instrumento para aplicar los recortes en sanidad.

Persistir en esta práctica perpetúa y profundiza el deterioro de nuestro sistema sanitario público. No debemos permanecer impasibles, porque el deterioro, aunque sea lento, es imparable, y acabará alcanzando un punto de difícil retorno en el que, entonces, tal vez sea demasiado tarde. Por todo ello, en defensa de nuestro sistema sanitario público andaluz y de la recuperación de su capacidad de respuesta y calidad perdidas, solicitamos al Ayuntamiento de Vélez-Málaga se comprometa a instar a la Junta de Andalucía a:

SOLICITUD

1. Adoptar las medidas presupuestarias y organizativas necesarias para recuperar el nivel de servicios sanitarios acorde con una atención sanitaria de calidad, que no ponga en riesgo la seguridad clínica de los pacientes, en especial durante los meses de verano, dotándolos de personal mediante la cobertura de ausencias de personal.

2. No establecer objetivos para las Unidades de Gestión Clínica (UGC) que pongan en riesgo la correcta asistencia a los pacientes.

3. Restituir en las UGC el sentido para el que fueron creadas, declarado por el propio Servicio
Andaluz, y que en último extremo busca mejorar la práctica clínica y la satisfacción de pacientes y profesionales.

4. No ligar las retribuciones vía productividad de los profesionales al cumplimiento de objetivos que hagan dudar de la correcta asistencia a los pacientes, y abstenerse de utilizar la UGC como ejecutoras de su política de recortes en los servicios sanitarios públicos.

En Vélez-Málaga, a 8 de agosto de 2016