◎ Tanto las dependencias de la Oficina de Atención al Ciudadano como la zona comercial, carentes de una climatización adecuada, distan de reunir las condiciones óptimas para prestar el servicio
◎ Ciudadanos, clientes y empresarios sufren las consecuencias de esta falta de previsión, que está impactando directamente sobre los negocios allí instalados
Vélez-Málaga, 8 de abril de 2019. Pese a estar plenamente operativo, lo cierto es que el Mercado de San Francisco de Vélez-Málaga no está terminado. Lo saben los vecinos y usuarios de la Oficina de Atención al Ciudadano (OAC) y de la Oficina de Información al Consumidor (OMIC), ambas situadas, desde octubre de 2016, en la primera planta del edificio, que nos han hecho llegar sus quejas sobre las condiciones que presenta el espacio dedicado a sala de espera de estas dependencias municipales, toda vez que los usuarios soportan corrientes de aire y el frío en los meses de invierno, así como el calor en los meses de verano.
Y lo saben quienes frecuentan o, mejor dicho, no frecuentan la planta baja, allí donde hasta fecha relativamente reciente se alojaba el mercado de abastos de la ciudad, actualmente dedicado a zona comercial y de restauración, que sufren la misma problemática. Y es que pese a haber sido inaugurado el pasado mes de septiembre tras recibir una inversión cercana al millón de euros, el remodelado Mercado de San Francisco carece de una bioclimatización adecuada que permita una estancia confortable dentro de sus instalaciones, lo que está repercutiendo en la afluencia de público a este centro llamado a dinamizar el casco antiguo.
Dependencias municipales
Como saben quienes deben trasladarse a este punto a hacer algún trámite, la Oficina de Atención al Ciudadano consta de un espacio semicerrado y con partes a cielo abierto, de tal manera que las personas usuarias, muchas veces personas mayores y adultos con niños pequeños, soportan las inclemencias meteorológicas mientras esperan su turno para ser atendidos. La adaptación de estas dependencias municipales, con una superficie de 320 metros cuadrados y que supuso una inversión de más de 36.000 euros, no ha repercutido, lamentablemente, en que esta parte de las instalaciones dedicadas al público se dotara de una sala de espera en unas condiciones mínimas de confort y que los vecinos que necesitan de los servicios de atención e información del Ayuntamiento esperen a ser atendidos de una manera digna.
Damnificados
Pero no son únicamente los ciudadanos que acuden a la primera planta quienes se están viendo perjudicados por esta falta de previsión. Los comerciantes están padeciendo especialmente una situación que tiene un impacto directo sobre una potencial clientela que tiene la manía de no querer congelarse mientras se toma algo en una terraza. De este modo, aunque las causas oficialmente aducidas sean otras, a nadie se le escapa que existe una relación directa entre las órdenes de desalojo expedidas hace unos días contra una serie de concesionarios y las dificultades añadidas para sacar adelante la actividad en las presentes circunstancias. De este modo, además de reclamar el que se dote de una climatización adecuada, eficiente y sostenible al edificio, nos sumamos a la petición de que se arbitre una solución para que los concesionarios damnificados -que mañana podrían ser otros si no se ponen los medios- puedan disponer de una prórroga que les permita remontar la situación actual o, en el peor de los casos, minimizar los daños.
PODEMOS VÉLEZ-MÁLAGA
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